utoridades de Yucatán y de la República de Corea refrendaron, este día, sus lazos de amistad y cooperación, con la firme convicción de seguir colaborando, a favor del desarrollo sostenible de los habitantes de ambas regiones.
La titular de la Secretaría General de Gobierno (SGG), María Fritz Sierra, y el embajador de ese país en México, Jeong-In Suh, encabezaron la ceremonia conmemorativa por el 60 aniversario de las relaciones diplomáticas entre las dos naciones, en el marco del cuarto Día de Corea en Mérida.
A nombre del Gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, la funcionaria resaltó la presencia de la comunidad coreana, conformada por más de dos mil descendientes, quienes han hecho del estado su hogar, y contribuido con su desarrollo y prosperidad.
Ha sido así desde hace más de un siglo, cuando en mayo de 1905 fue la llegada de la primera inmigración coreana, con cerca de mil personas, la cual cimentó las bases de un estrecho lazo de amistad y colaboración, en todos los niveles, entre los territorios, expresó.
«La historia que yucatecos, coreanos y coreanos yucatecos tenemos, es un trascendente trayecto de vida: tenemos un pasado que recordamos, un presente que vivimos y un futuro que, juntos, seguiremos forjando», recalcó ante funcionarios estatales, municipales y dirigentes de organismos empresariales.
Destacó el diálogo entre la Embajada de Corea y la administración de Vila Dosal, que tiende a fortalecer vínculos comerciales y económicos, los cuales se han traducido en visitas del Gobernador, en 2018 y 2019, a las plantas de KIA Motors y Kyunshi, en la zona económica de Incheon.
Esos viajes tuvieron la finalidad de acercar información sobre la posición estratégica de Yucatán a aquella región. También, mencionó Fritz Sierra las contribuciones coreanas al Hospital de la Amistad y actos culturales, que marcan la hermandad existente entre la entidad y esa nación.
Igual, dijo que la estrecha relación bilateral va más allá de la amistad, toda vez que el país asiático es el sexto socio comercial de México y este es el primero de Corea en América Latina, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía federal.
Para su discurso oficial, durante la ceremonia conmemorativa, el embajador Jeong-In Suh reconoció que las autoridades locales valoran las contribuciones de aquellos viajeros y sus descendientes, al desarrollo social y la diversidad cultural en esta península.
Mencionó que, en Mérida, desde 2017, existe la avenida República de Corea y, el año pasado, se colocó en ella el Greetingman (Monumento del hombre que agradece), muestras de la fraternidad, a lo que se suma el referido nosocomio, fundado en 2005, para conmemorar el centenario de la inmigración.
Recordó las aportaciones económicas de sus paisanos en diáspora a la Independencia de su país, con las cuales este ha logrado colocarse como una de las 10 economías más grandes del mundo.
Informó que, el pasado 1 de marzo, su Gobierno y el mexicano reanudaron negociaciones del Tratado de Libre Comercio, 15 años después de su suspensión, y agregó: «Estoy convencido de que el TLC bilateral nos permitirá construir una base sólida de cooperación, entre ambos países, orientada al futuro».
«Estoy honrado y conmovido por la amistad, que ha estado creciendo cada vez más, desde hace 117 años, a pesar de una gran distancia geográfica entre las dos naciones», expresó, antes de ratificar su deseo y propósito de que, en el provenir, estas relaciones sean más prósperas.
Al significativo y emotivo acto, acudieron el presidente de la Fundación de Coreanos en el Extranjero, Kim Sung-Gon; una delegación artística de ese país; el secretario del Ayuntamiento de Mérida, Alejandro Ruz Castro; el diputado local José Rihani González, y descendientes de inmigrantes, encabezados por el líder de su Asociación, Juan Durán Cong, entre otras personas invitadas.